Defensa de la escuela laica

Defensa de la escuela laica por Andrés Ovejero,diputado a cortes constituyentes(las de 1931) .Fragmento extraído del libro «Evangelio de la República»(libro de texto de 1932 para enseñar a los niños la nueva Constitución).

«La escuela será laica. No debe entenderse esta palabra en un sentido de oposición a las creencias religiosas. No es este su significado.
Por el contrario, este principio(el laicismo) denota el máximo respeto a vuestra conciencia de niños y a la conciencia del maestro.

Al excluir de la escuela la religión no se la excluye de la vida. En los pueblos primitivos todo era religioso. El sacerdote ejercía la medicina con fórmulas mágicas, el derecho con preceptos rituales, la enseñanza con fundamentos dogmáticos.
Hoy la justicia la ejerce el juez, la medicina el facultativo, la enseñanza el maestro.

En el recinto del templo para los fieles, en la intimidad de la conciencia para el creyente pueden y deben vivir las religiones.
El culto en lo sagrado del templo. La fe en el sagrado de la conciencia.

Al disponer que las doctrinas de las Iglesias hayan de darse en sus propios establecimientos, no se hace otra cosa que reconocer que las cosas santas deben tratarse santamente.

El laicismo no es un precepto ofensivo para ninguna religión, es un concepto defensivo de todas.No se da al vocablo laico acepción distinta de la que etimológica e históricamente le corresponde.
Laico equivale a lego. Laico, lego, seglar, popular.

Desde que el cristianismo con su creencia en un solo Dios verdadero triunfó sobre el paganismo creyente en muchos dioses falsos, no ha habido ideal de religiosidad mayor que el del laicismo. No impone ninguna creencia; las respeta todas. No ofende a ninguna conciencia; defiende la libertad de conciencia, sin la cual no hay religiosidad posible».